La cantante y actriz australiana, Olivia Newton-John vive los peores días de su vida, al confirmarse que, a sus 68 años, padece una enfermedad relacionada con la ciática, que le impediría caminar y moverse, además de tener que lidiar con los problemas de su hija, quien padeció de anorexia, ha estado envuelta en adicción a las drogas y ahora está obsesionada con las bebidas energizantes.

Quien deslumbrara en el reciente Festival de Viña del Mar, con sus éxitos de los 80 y su carisma de “Sandy”, el personaje de “Grease” que la llevó al estrellato, no lo está pasando para nada bien. Recientemente tuvo que cancelar sus conciertos por estos problemas de salud, que la tienen en cama por los fuertes dolores.

La artista australiana confirmó esta situación en su propio Facebook, escribiendo:

‘Lamentamos mucho anunciar que los conciertos de Olivia Newton-John programados para mayo serán postergados debido a un problema grave con la ciática. Una vez que las fechas sean reprogramadas, lo publicaremos lo antes posible’.

A esto hay que sumarle los problemas de su hija, Chloe Lattanzzi, quien también es cantante, y que durante su vida ha vivido diversos problemas de adicción, de la que sale y recae. Esto tendría a Newton-John muy preocupada, no ayudándole para nada en su recuperación.

¡Conoce a la hija de Olivia Newton-John!