Benjamín llegó de sus vacaciones y le contó a su madre que tuvo un buen viaje. Esto le ayudó a reflexionar y a plantearse muchos aspectos de su vida, incluido lo que sentía por Francisco, asegurando que ya lo había dejado atrás.

Matías llegó para saludarlo y ante un tenso abrazo Benjamín le preguntó cómo se estaba portando y si cuidaba como correspondía de Verónica. El joven sospecha de él y le hizo uno advertencia que perturbó la calma del profesor.